"Dentro del monumento granadino, en el Patio de los Aljibes, hoy se conserva una placa que recuerda la hazaña de este soldado: «A la memoria del cabo de "Inválidos" José García que con riesgo de perder la vida salvó la Reina de los Alcázares y torres de la Alambra en 1812»
La ciudad de Granada sufrió en sus carnes las consecuencias más dolorosas de la invasión francesa . Una parte de la estructura que conforma el complejo de la Alhambra quedó destruida. En su retirada forzosa, el mariscal francés Jean de Dieu Soult ordenó volar por los aires las fortificaciones de la Alhambra de Granada. Entre el mito y la realidad, las torres del recinto fueron explotando una tras otra hasta que, cerca ya de los palacios nazaríes, el cabo de Inválidos José García obstaculizó el hilo de pólvora con su propio cuerpo. Su hazaña evitó una pérdida histórica.
Poco más se sabe de este héroe casi anónimo. La tradición oral canta que José García ingresó en el Cuerpo de Inválidos del Ejército español –antiguo cuerpo que integraban los soldados que habían sido mutilados en combate– a consecuencia de la pérdida de una mano y de una grave herida en la pierna, tras la batalla de Bailén . El otro dato básico sobre su biografía es la fecha de su muerte: el granadino falleció en 1834 víctima del cólera. El resto de su relato vital se entremezcla con la leyenda, en el mejor de los casos, cuando no se pierde en el terreno de lo incierto.
De una forma u otra, la leyenda pasó de generación en generación y la vigilancia de los recintos de la Alhambra fue encomendada al Cuerpo de Inválidos, concretamente se encargaron del cuidado de los bosques, parques y jardines."
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"Inside the Granada monument, in the Patio de los Aljibes, today a plaque is preserved that remembers the feat of this soldier: «To the memory of the "Invalids" corporal José García who, at the risk of losing his life, saved the Queen of the Alcázares and towers of the Alambra in 1812»
The city of Granada suffered firsthand the most painful consequences of the French invasion. A part of the structure that makes up the Alhambra complex was destroyed. In his forced retreat, French Marshal Jean de Dieu Soult ordered the fortifications of the Alhambra in Granada to be blown up. Between myth and reality, the towers of the enclosure exploded one after another until, close to the Nasrid palaces, Invalidos Corporal José García obstructed the gunpowder stream with his own body. His feat avoided a historical loss.
Little else is known about this almost anonymous hero. Oral tradition says that José García joined the Invalid Corps of the Spanish Army – the former corps made up of soldiers who had been mutilated in combat – as a result of the loss of a hand and a serious wound in the leg, after the battle. from Bailen. The other basic information about his biography is the date of his death: the man from Granada died in 1834, a victim of cholera. The rest of his life story is intertwined with legend, in the best of cases, when it does not get lost in the field of uncertainty.
In one way or another, the legend was passed from generation to generation and the surveillance of the precincts of the Alhambra was entrusted to the Corps of Invalids, specifically they were in charge of the care of the forests, parks and gardens."
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