El reloj que corona la fachada del Ayuntamiento de Villanueva de Tapia dispone de una esfera redonda realizada en mármol blanco en contraste con el negro de los números arábigos y las manecillas. En un principio este bonito reloj resalta sobre la fachada del Ayuntamiento, pero decepciona al comprobar que no funciona correctamente.
El edificio del ayuntamiento consta de dos plantas y está compartido por la Guardia Civil y el centro de salud, el ayuntamiento, que ocupa la parte central del edificio, dispone de un reloj en la parte superior de la fachada, un gran balcón donde lucen las banderas oficiales y la entrada se realiza por una rampa que permite el acceso a personas con movilidad reducida. En el interior están todas las dependencias municipales y la alcaldía.
"La situación geográfica de Villanueva de Tapia (entre los límites de las provincias de Córdoba, Granada y Málaga) le ha convertido en un lugar de paso obligado, incluso desde épocas prehistóricas, por los numerosos restos de material lítico y hachas pulimentadas aparecidas en los alrededores de los Llanos de la Laguna.
Fue habitada también por romanos y árabes, hecho que se evidencia por el hallazgo de restos arqueológicos como muros de época altoimperial (s.I-II d.C.) formados por piedras locales bien escuadradas, unidos a seco o con barro. La cerámica aparecida es altoimperial, se trata de pequeños trozos de terra sigillata decorada con círculos, guirnaldas, motivos animales y humanos.
También han aparecido restos correspondientes al Bajo Imperio (IV d.C,) como materiales constructivos tipo tégulas, ladrillos macizos e imbrices, así como restos metálicos.
Después de la larga etapa de presencia musulmana, a lo largo del s. XVI, se instalan en la comarca nuevas gentes que se integran en el sustrato poblacional que permanece en estas tierras, constituyendo a través de un nuevo orden político, social y económico, la base sobre la que se asienta la estructuración en municipios poblacionales en la edad moderna.
Hoy en día se sigue llamando popularmente a Villanueva de Tapia como ‘El Entredicho’. El origen de este nombre se remonta a finales del siglo XV, al terminar la reconquista. Desde el s. XVI Archidona, perteneciente a los Duques de Osuna, e Iznájar, bajo la jurisdicción de la Casa de Córdoba, se disputaron estas tierras ya que los terrenos del actual término de Villanueva de Tapia, ricos en pastos, con un importante bosque mediterráneo y con algunas hazas de labor, se encontraban en el límite jurisdiccional entre ambos municipios.
Las polémicas suscitadas por este asunto, le valieron a este municipio el sobrenombre de “El Entredicho”. Del mismo modo, su situación geográfica, sobre todo por el Este, ha hecho de este pueblo a lo largo de su historia, paso obligado de viajeros y mercancías que se dirigían hacia Córdoba, lo que ha producido conflictos en cuanto a su pertenencia a la provincia de Málaga o a la de Córdoba."
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The clock that crowns the façade of the Villanueva de Tapia Town Hall has a round dial made of white marble in contrast to the black Arabic numerals and hands. At first this beautiful clock stands out on the façade of the Town Hall, but it disappoints when it is found that it does not work correctly.
The town hall building consists of two floors and is shared by the Civil Guard and the health center. The town hall, which occupies the central part of the building, has a clock at the top of the façade, a large balcony where the official flags and the entrance is via a ramp that allows access to people with reduced mobility. Inside are all the municipal offices and the mayor's office.
"The geographical location of Villanueva de Tapia (between the limits of the provinces of Córdoba, Granada and Málaga) has made it an obligatory place of passage, even since prehistoric times, due to the numerous remains of lithic material and polished axes that appeared in the around the Llanos de la Laguna.
It was also inhabited by Romans and Arabs, a fact that is evidenced by the discovery of archaeological remains such as walls from the early imperial period (1st-2nd century AD) formed by well-squared local stones, joined with dry or mud. The ceramics that appeared are high imperial, they are small pieces of terra sigillata decorated with circles, garlands, animal and human motifs.
Remains corresponding to the Low Empire (IV AD) have also appeared, such as construction materials such as tegulas, solid bricks and imbrices, as well as metal remains.
After the long period of Muslim presence, throughout the s. XVI, new people settle in the region and integrate into the population substratum that remains in these lands, constituting through a new political, social and economic order, the basis on which the structuring of population municipalities in the age is based. modern.
Today Villanueva de Tapia is still popularly called 'El Entredicho'. The origin of this name dates back to the end of the 15th century, at the end of the reconquest. Since the s. XVI Archidona, belonging to the Dukes of Osuna, and Iznájar, under the jurisdiction of the House of Córdoba, disputed these lands since the lands of the current municipality of Villanueva de Tapia, rich in pastures, with an important Mediterranean forest and with some feats of work, were on the jurisdictional boundary between both municipalities.
The controversies raised by this matter earned this municipality the nickname “El Entredicho.” In the same way, its geographical location, especially in the East, has made this town throughout its history an obligatory passage for travelers and goods heading towards Córdoba, which has produced conflicts regarding its belonging to the province of Málaga or Córdoba."
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